Entre el 5 y el 8% de la población adulta española y entre el 8 y el 12% de los niños sufren asma, enfermedad que empeora y limita significativamente la calidad de vida de quien la padece si no se controla adecuadamente. En la actualidad existen fármacos efectivos, tanto para controlar la enfermedad, que deben tomarse cada día y a largo plazo, aunque no se tengan síntomas, como para aliviar sólo los síntomas.

En cuanto a los obstáculos para el control del asma, los expertos internacionales señalan la dificultad en el diagnóstico, el acceso a la atención médica, que los pacientes no reconozcan que sufren un problema de salud, o que los interpreten como otra enfermedad.

También es un obstáculo la falta de información, o una información errónea acerca de la enfermedad, "las personas asmáticas tienen diferentes grados de educación sanitaria con respecto al asma. Pueden no saber el significado del concepto ?control del asma", o no conocer cuándo, dónde y de qué manera deben pedir ayuda cuando su asma empeora para recupera el control de la enfermedad de manera precoz y eficaz?, ha señalado el doctor Miguel Perpiñá, neumólogo del Hospital Universitario La Fe de Valencia.

Según este especialista, una persona asmática tiene su enfermedad controlada si no tiene (o son mínimos) síntomas de asma: no se despierta por la noche por causa de la enfermedad, no tiene (o es mínima) la necesidad de usar un inhalador para aliviar la respiración, no necesita ir a urgencias, hace una vida normal en cuanto a actividad física y ejercicio y presenta mediciones normales (o casi) en las pruebas respiratorias. El medioambiente también es un obstáculo importante, ya que las personas con asma pueden estar expuestas a la contaminación ambiental en el interior de la casa o en el exterior. La exposición al humo del tabaco, a los productos químicos en el trabajo o los altos niveles de contaminación son algunas de las barreras que impiden a los asmáticos controlar su enfermedad. Aunque no es el caso de nuestro país, la falta de disponibilidad de fármacos en los países en los que el Sistema de Salud no es universal, es otro de los obstáculos señalados por la Global Initiative for Asthma (GINA).

La utilización de los fármacos, las campañas de sensibilización y sobre todo la lucha contra el tabaco, son algunas de las herramientas para el control de la enfermedad. También lo es la realización de versiones locales de la Iniciativa Global para el Asma (GINA) u otras guías internacionales, basadas en la evidencia científica actual. En España, contamos con un documento científico adaptado de GINA y que tiene versiones para la población general y para educadores en asma que ayuda a mejorar el tratamiento de los asmáticos (http://www.gemasma.com)

Existe un nuevo test de control del asma, diseñado para que lo conteste el propio paciente y evalúe, según los resultados (cinco preguntas que se evalúan del 1 al 5), en qué grado ha alcanzado, o no, el control de la enfermedad. Está disponible en la dirección http://www.asthmaactionamerica.com