A los problemas alimenticios actuales, hay que añadir, según Luis Moreno, responsable del estudio, y profesor de la escuela universitaria de Ciencias de la Salud de la Universidad de Zaragoza, habría que añadir la actitud negativa de los adolescentes hacia el deporte, "desde los 13 a los 18 años" ha señalado- hay una disminución muy dramática y significativa de la realización de actividad física. Si el adolescente no es una persona activa será muy difícil que lo sea cuando pase a ser adulto?, ha afirmado Moreno. Los resultados de este trabajo dicen que los chicos hacen más deporte que las chicas, sin embargo los motivos que les llevan a practicar algún deporte vienen determinados más por cuestiones de ocio que por ser una actividad saludable.

El estudio Avena se ha realizado en cinco ciudades: Granada, Madrid, Murcia, Zaragoza y Santander, y en cada una de ellas se perseguía un objetivo concreto: estudiar la condición física y bioquímica, valorar la inmunidad, analizar la dieta, estudiar aspectos genéticos y valorar la composición corporal, respectivamente. De una muestra de 2.800 adolescentes tomada en el año 2000, la prevalencia de sobrepeso más obesidad en varones fue del 25,7 por ciento y en mujeres del 19,1 por ciento. La prevalencia de obesidad fue del 5,7 y el 3,1 por ciento respectivamente.

Los datos de este trabajo, tomados entre el año 2000 y el 2002, mostraron que el incremento del índice de masa corporal (IMC) fue paralelo al incremento del porcentaje de grasa corporal, valorado con la medida del grosor del pliegue subcutáneo. En los chicos, el porcentaje de grasa corporal registrado era del 15,56 por ciento en adolescentes con normopeso, del 18,37 por ciento en los de sobrepeso y del 42,44 en los obesos. En las chicas el porcentaje de grasa corporal fue del 23,73 por ciento, del 31,98 y del 41,54 respectivamente.

Según señala el doctor Moreno el problema ha de prevenirse antes de la adolescencia, que debe comenzar con el pediatra, la introducción de hábitos alimenticios adecuados y la actividad física. Esta educación debe continuar en los centros escolares y en la propia familia.