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| Revista Electrónica de Salud y Mujer |
| Abril 2007 |
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| El dolor de espalda es más frecuente que el resfriado |
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portada RESYM |
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El sobrepeso, las malas posturas y el sedentarismo son los factores más perjudiciales
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El dolor de espalda es el problema médico más frecuente después del resfriado común Hasta el 80% de la población ha llegado a sufrir dolor de espalda. Es el dolor más extendido y el responsable de una de cada tres bajas laborales. El dolor lumbar es más frecuente en personas con sobrepeso, mala forma física, malos hábitos posturales o en quienes someten su espalda a sobrecargas inadecuadas, como levantar objetos demasiado pesados o cualquier carga de manera incorrecta. La mitad de las mujeres embarazadas también van a sufrir dolor lumbar debido al peso extra que soportan durante su gestación. También los movimientos bruscos o no correctos e incluso el estrés, son algunos de los factores responsables de convertir esta dolencia en el primer motivo de invalidez antes de los 45 años.
La columna vertebral está formada por 33 vértebras: 7 cervicales, 12 dorsales, 5 lumbares (todas ellas separadas por 23 discos intervertebrales), 5 vértebras más en el sacro y 4 en el coxis. Dependiendo de dónde se produzca la inflamación o la contracción (se produce cuando se exige al músculo un trabajo superior al que puede realizar, ya sea intenso o por estar durante unas horas en una postura inadecuada), se denomina lumbalgia, dorsalgia, cervicalgia... Cuando el problema se encuentra en las cervicales se produce el dolor de cuello. Los nervios, los músculos y los ligamentos de esta zona están muy comprimidos y aumenta el desgaste. Además del dolor de cuello, hombros y a veces nuca, pueden aparecer jaquecas, trastornos de audición, visión, mareos e incluso entumecimiento de las extremidades. El dolor en la zona lumbar es el más extendido, el más conocido popularmente como "dolor de espalda". Se sitúa entre las costillas y el límite inferior de las nalgas. En esta zona se localiza la hernia discal y la ciática, y se producen los dolores más agudos. Se presenta en personas con una actividad muy sedentaria, lo que origina la atrofia muscular; o bien con una actividad física excesiva, que utilizan incorrectamente la columna, los giros no son los adecuados, manipulan más carga de la que puede soportar la columna, o la manipulan incorrectamente, sobrecargando más un lado que otro. El dolor de espalda también se puede producir por problemas orgánicos en la columna, alteraciones en la estructura, como es la escoliosis (curvatura anormal de la columna), o cifosis (conocida popularmente como joroba)... Según los especialistas la mejor manera de prevenir el dolor de espalda es evitar el sobrepeso, tener una higiene postural correcta, combatir el sedentarismo y realizar ejercicio con moderación para fortalecer la musculatura. |
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Natación, el deporte más adecuado
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| Cuando ya se padecen dolores de espalda, hay ciertos deportes que agravan el problema, es el caso de los deportes que exigen movimientos bruscos, girar la columna o dar saltos. Es el caso del squach, el tenis, el golf, montar a caballo, incluso el baloncesto. La natación es el más beneficioso, de los deportes, sobretodo en la modalidad de crowl y espalda, ya que tiende a potenciar la musculatura simétricamente. Nadar a braza provoca una mayor sobrecarga de la musculatura cérvico-dorsal, especialmente si se mantiene constantemente la cabeza fuera del agua, forzando la columna a arquearse hacia atrás. Antes de practicarlo como tratamiento es conveniente asesorarse por algún especialista, ya que no tener un buen nivel de natación o un estilo con "vicios" no corregidos puede ser más perjudicial. | |
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Tratamientos
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| Entre el 70 y el 80% de los dolores lumbares mejoran dentro del primer mes, independientemente del tratamiento que reciban, aunque las recurrencias son frecuentes. El pronóstico funcional es peor cuanto mayor sea el tiempo que el paciente tarda en incorporarse a su vida normal. La mayor parte de los pacientes con lumbalgia aguada no requieren reposo en cama. Sólo en casos de dolor intenso que empeora al estar de pie o con los movimientos, puede hacerse reposo en cama, pero no deberá prolongarse más de tres días. Pasado ese tiempo es imprescindible comenzar a levantarse y a realizar una actividad física suave y progresiva, según se vaya notando menos dolor. Para aliviar el dolor se puede recurrir a la fitoterapia (aplicar frío, calor, masajes, aparatos de onda corta, ultrasonido, magnetoterapia, láser), manipulaciones vertebrales realizadas por osteópatas y quiroprácticos, acupuntura, infliltraciones, estiramientos, plantillas y alzas (en algunos casos pueden aliviar el dolor mejorando el reparto de la carga), fármacos (antiinflamatorios y relajantes musculares) | |
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Higiene postural en la actividad diaria
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Sentarse de forma adecuada No apoyar correctamente la espalda en la silla, supone un aumento hasta del 40% de la carga que soportan los discos vertebrales. A más carga, más riesgo de desgaste y aparece el dolor.
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Más información
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Web de Espalda.org www.espalda.org Sociedad Española de Reumatología www.ser.es Ver sección de pacientes |
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Recursos Relacionados:
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Confirmación de la eficacia de un programa educativo interdisciplinar en pacientes con dolor de espalda crónico
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