España se incorpora al Comité de Dirección del Programa Conjunto sobre Alzheimer de la Unión Europea (UE) y coordinará a través del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) cinco proyectos de investigación relacionadas con la enfermedad junto a Francia, Alemania e Inglaterra. Estas líneas de investigación se basarán en el diseño de un modelo animal único en Europa, la búsqueda de marcadores moleculares y de imagen en la enfermedad de Alzheimer de conocimiento precoz y en las primeras fases de la enfermedad convencional; la investigación en intervenciones farmacológicas; y la investigación en cuidados y tecnologías de ayuda a la dependencia y discapacidad. Así lo anunciaba la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendía en el VI Simposio Internacional "Avances en la Enfermedad de Alzheimer", coincidiendo con el día mundial de esta enfermedad (21 de septiembre).

Recordó también que este Ministerio, a través del ISCIII, destina al año 16 millones de euros para el estudio de la enfermedad, lo que supone más del 80 por ciento de los recursos que el sector público invierte en este campo.

Según el doctor Luis Agüera, responsable de la Unidad de Investigación Proyecto Alzheimer de la Fundación Reina Sofía, además de los avances en algunos fármacos, "existen un par de vacunas candidatas, que no presentan los problemas de tolerabilidad de sus antecesoras, que podrían llegar al mercado en unos años".

El Alzhéimer es una enfermedad neurodegenerativa caracterizada por el deterioro de las facultades físicas y mentales de quienes la padecen, que afecta a unos 26 millones de personas en todo el mundo. Coincidiendo con este Día Mundial, la Confederación Española de Familiares de Enfermos de Alzheimer y otras Demencias (Ceafa) centra sus reivindicaciones en el desarrollo de la ley de Dependencia que, a su juicio, precisa de más dinero para atender adecuadamente a sus usuarios, entre ellos, los pacientes con Alzhéimer. También señalan la necesidad de más centros de día y residencias específicas para los afectados, ya que, según señalan, es algo recogido en la propia ley de autonomía personal. El artículo 24 establece una tipología de recursos en la que se incluyen "centros de día de atención especializada", donde tendrían cabida los lugares específicos para enfermos de Alzhéimer.