Resumen: |
El medio rural engloba, quizá artificialmente, un grupo heterogéneo de entidades definidas por múltiples factores como número de habitantes, facilidad para las comunicaciones y cercanía a capital. Sea cual sea el núcleo rural al que nos refiramos, se siguen manteniendo singularidades que se deben tener en cuenta en el proceso de comunicación asistencial, a saber: Los límites de la consulta se amplían a otros lugares como la tienda o el bar, lo que condiciona el contenido y la recepción del mensaje, El receptor (los paciente o usuarios) ha cambiado. La concepción de salud y enfermedad ya no es tan distinta a como lo era hace tres décadas. A ello han contribuido decisivamente los medios de comunicación en especial la televisión, La reforma de la Atención Primaria, la agrupación de los profesionales en centros de salud y el proceso de culturización de la población rural ha contribuido a que el emisor, enfermeros y médicos, hayan modificado su papel de un estilo paternalista, a otro asesor y de cooperación. Se mantiene y aun se amplia, con respecto al medio urbano, la importancia del profesional que muestra las características del buen comunicador: empatía, cordialidad, baja reactividad y respeto. |