ACCEDES-El acceso y éxito académico de colectivos vulnerables en entornos de riesgo en Latinoamérica

En Costa Rica se ha creado un concepto de “educación ideal” en muchas personas. La  fantasía de estado ideal y “Suiza Centroamericana” son estereotipos que han creado los grupos dominantes como lo son la Iglesia católica y personas de origen caucásico, muchas de las cuales no reconocen o validan lo que no conocen, excluyendo del sistema a otros grupos. En buena medida, este es el caso del cantón de Talamanca, uno de los más excluidos de Costa Rica, a pesar de su gran riqueza natural y productiva.

La región  Huetar Atlántica, que es a la que pertenece Talamanca, es la segunda región generadora de exportaciones del país, lo cual hace notar que la riqueza se genera, pero no se percibe ni se muestra.

El gobierno ha declarado que Talamanca es uno de los cantones más pobres del país. El lugar implora ayuda del gobierno, y la atención debe partir desde necesidades las necesidades particulares,  las cuales son  complejas de de enfrentar.

La explotación que se le hace a las personas indígenas es mucha, ya que a pesar de la gran producción, la retribución es casi invisible. El estado no lleva a todas las comunidades los servicios adecuados, tanto de salud.

Costa Rica en su tiempo invirtió considerablemente en la educación como vía hacia el progreso, a pesar de los buenos resultados que esto trajo al país, alrededor de los años ochenta la inversión se redujo, con esto la políticas diferenciales que eran las que atendían regiones como Talamanca, prácticamente desaparecieron, lo cual implicó un destino de pobreza para una población que ya corría altos riesgos.

Actualmente, los niños y niñas corren grandes peligros para poder recibir educación. Tienen que levantarse de madrugada para que les dé tiempo de llegar a la escuela, para la cual deben recorrer una distancia de aproximadamente tres horas, en donde corren altos  puesto que ni siquiera existe un camino seguro, tienen que trasladarse por la montaña.

Para tener la esperanza y avanzar, hay que pensar en un modelo incluyente, en el cual se le den mayores oportunidades a las y los jóvenes de crecimiento.